Viñetas a pajera!

LAS AVENTURAS DEL MUY HIJO DE PUH

Edita: TBOmuybien Ediciones

Murcia, 2010

tamaño: 15 x 10 cm.

Fotocopia B/N en papel amarillo.

Número páginas: 16

Encuadernado con grapa.

Tirada: 500 ejemplares.

PVP: 0’50 €.

Francisco José Sáez Nuñez, ‘Frank Sythe’, narra, en un mundo de seres antropomórficos, las peripecias cotidianas de un joven oso que responde al nombre de Puh que es mal encarado, aprovechado y egoísta. Individuo que no tiene amigos y se relaciona con otros marginados sociales en una sociedad de drogas, violencia y mentiras.

LAS AVENTURAS DEL MUY HIJO DE PUH:

                                                       EL MUNDO A SUS PIES

Edita: TBOmuybien Ediciones / Floxxon Comics

Murcia, 2013

Tamaño: 15 x 21 cm.

Imprenta. Portada con solapas a color e interiores B/N.

Número páginas: 68

Encuadernado con lomo

Tirada: 500 ejemplares

PVP: 5€

Depósito Legal: AB-440-20B

ISBN: 978-84-15788-95-9

Imprenta: Uno Editorial (Albacete)

Francisco Sáez Núñez, ‘Frank Sythe’, reedita Las aventuras del muy hijo de Puh, publicadas en 2010, mejorando la reproducción y añadiendo muchas más páginas y algunos extras como bocetos preliminares, dibujos del proceso creativo, merchandising o dibujos del personaje realizados por otros dibujantes amigos como Grego Fernández, Manu Riquelme o Javi Godoy. Más peripecias cotidianas de estos seres antropomórficos aprovechados y egoístas en una sociedad viciosa y pendenciera.

“Pidget el pijo, Jacopaco, Pollo, Patochato… para todos sus amigos y conocidos tiene el muyhijodePúh un mote, un defecto a resaltar, y de todo y todos opina su mente inquieta… ¿De dónde sale esa violencia psicológica? Quizás le viene de la frustración por no poder triunfar sin venderse artísticamente, o por no triunfar de ninguna otra manera tampoco; quizás de intentar alejarse de la sombra proyectada por un padre famoso que vive de las rentas. Quizás hay un pequeño hijodepúh en cada uno de nosotros, que no nos atrevemos a dejar salir, porque la verdad es que este tío te hace gracia un rato, pero luego, oye, que se vaya con sus mierdas y su mala leche a otro sitio.”